04 marzo 2010
Vuelvo a escribir aunque...
Soy consciente de que no es agradable leer tanta miseria y cansa, nos aparta de pensamientos felices y hay quien prefiere ignorar cuanto aquí se cuenta para mantenerse en el limbo y no amargarse la vida.
Pero el conocimiento nos pone a pensar. Es necesario que seamos conscientes de lo que está sucediendo en España. De otra forma cuando nos demos cuenta de las consecuencias y del alcance de lo acontecido, será tarde y no vale engañarse uno mismo no queriendo saber porque es algo que más temprano que tarde le afectará. Y a sus hijos... y a sus nietos.
Escribía el magistrado de la Audiencia Nacional D. José Luis Requero que «"En la apertura de los Tribunales de 1948, el Presidente del Tribunal Supremo, Castán, disertó sobre el sentido jurídico –el «genio», decía– del pueblo español. No era el mejor momento político ni histórico para presumir de ello, pero dejó constancia de un sentido que parece ir reblandeciéndose. Ahora quien está al baño María es el Tribunal Constitucional, pero no está solo: le acompañan todos los españoles. El Poder político se siente omnipotente, nadie puede obstaculizar sus planes y si el Estado de Derecho –o los tribunales– se cruzan en su camino puede cocerlos hasta ablandarlos. Como este pueblo no recupere ese genio y, con él, el sentido de su dignidad, no sabrá poner límites a un poder político tan ensoberbecido como irresponsable"».
Parece escrito hoy. No estamos en ese camino sino en el de abandonarnos y dejar hacer. Empezando por el Rey, posiblemente el último rey de España. Y no será por las ansias republicanas del pueblo español que hubiera encontrado en el Rey a su Lancelot, el que habría de liberar a España, nuestra amada dama, en un acto de coraje y sacrificio personal; el árbitro y moderador que todos esperábamos para que pusiera coto a tanto desmán y abuso pero que en un acto de cobardía y oscuros intereses mira para otro lado dejando hacer a los enemigos de España. Por decisión suya debida a su dejación y omisión del papel que le encomienda la Constitución como árbitro y moderador, la corona es criticada y despreciada por muchos españoles que antes la admiraban.
Don Juan Carlos ha sentenciado a la realeza en España, que posiblemente disfruta de sus últimos días y privilegios. No llegará más allá de su heredero, el que se mostró más dispuesto a cumplir su santa voluntad que a cumplir con España y capaz de cometer errores como el de asistir a fiestecitas privadas organizadas por personajes republicanos como Joaquín Sabina para dejarse putear sentándose debajo de la bandera republicana. Afán de lucro y ausencia de responsabilidad y dignidad borbónica. No puede interpretarse de otra forma la actitud de la Corona española que de sumisión al poder político que le permitió demasiadas cosas y las calla a cambio de que también calle el Rey. Sus leales, los que sabían, también se van extinguiendo.
Sin duda, los españoles –el pueblo– estamos lejos de recuperar el «genio» y el sentido de la dignidad y mucho más lejos todavía de poner límites al poder político que nos desgobierna en su propio beneficio. Vaya en nuestro descargo que la oposición ejerce poco y flojito, no vaya a hacer pupa o le vayan a sacar algún caso de corrupción guardado al efecto. Estamos solos.
Aunque como pueblo llano todavía nos queda aquello del «genio y figura hasta la sepultura» que todavía recuerdan los franceses de Napoleón. Si fuimos capaces de echarlos a gorrazos, a un Zapatero cualquiera y a su cuadrilla debería ser fácil correrlos a "urnazos". Veremos, porque hay más lerdos de lo que parece y mucho apesebrado que le enaltece.
ZP reo de alta traición - IV
El juez Gómez Benítez. Vendió su dignidad
y su ética al PSOE a cambio de un plato de
vocal en el CGPJ.
Despacio pero sin pausa se van conociendo los indecentes tejemanejes del presidente Rodríguez, alias ZP, que ha sido capaz de ofrecer a ETA la anexión de Navarra al País Vasco, la impunidad de las organizaciones etarras Jarrai y del Partido Comunista de las Tierras Vascas, la excarcelación del asesino múltiple De Juana Chaos y la aceptación de un Gobierno autonómico compuesto por el PNV y el brazo político de ETA para que gobernase en el País Vasco, incluyendo la anexionada Navarra.
Semejante felonía era un paso definitivo para la independencia del País Vasco y, de haberse consumado la "hoja de ruta", suficiente para el procesamiento de ZP y otros actores por alta traición. Entre ellos, el Juez Gómez Benítez, interlocutor por parte del "Gobierno" en aquellas reuniones, por entonces abogado de la confianza del PSOE y hoy vocal del Consejo General del Poder Judicial, cargo al que ascendió sin duda en pago por los servicios prestados a los intereses socialistas, que no a los nacionales. Además de este juez, participaron en las negociaciones para romper la integridad nacional el presidente del Partido Socialista de Euskadi (PSE), Jesús Eguiguren, y el ex fiscal general del Estado, Javier Moscoso, todos ellos colaboradores necesarios y cómplices.
Todo ello forma parte del contenido de las reuniones mantenidas por representantes del "Gobierno" español y ETA en Oslo, en diciembre de 2006, según las actas incautadas en Francia a los etarras que han sido desveladas por el periódico El Mundo el 3 de marzo 2010.
Nuestro indigno presidente recibió una ETA prácticamente derrotada. Nunca había estado la banda tan débil como entonces, en todos sus frentes: en el "armado", en el institucional, en el social, en el económico. Pero no olvidemos que, en marzo de 2004, los enviados del PSOE llevaban tiempo negociando con ETA, así que cuando Rodríguez llegó a la presidencia, la banda terrorista consiguió uno de sus objetivos eternos: ser reconocido por el Estado español como interlocutor válido, y además con arbitraje internacional. Otra traición más.
Conseguido esto, las negociaciones con ETA, siempre negadas, se sucedieron y así, en diciembre de 2006 el "Gobierno" español ya ofrecía todo aquello por lo que ETA había estado matando para conseguirlo. O casi todo.
ETA vió tan débil y entregado al presidente Rodríguez, obsesionado por apuntarse la gloria del fin de ETA a cualquier precio, que tiraron demasiado de la cuerda y se rompió. Una gran parte de ETA reprocha a su cúpula el no haber aceptado tan generoso e inaudito ofrecimiento o por lo menos no haber roto las negociaciones cuando tenían encima de la mesa una serie de objetivos ya conseguidos, así que hoy muchos están exigiendo a ETA que retome las negociaciones allí donde las dejaron.
En eso están, pero después de haya llegado a la opinión pública el contenido de las reuniones, lo que se puede esperar es que adopten todas las medidas necesarias para que se desarrollen con el máximo secreto y nos den hechos consumados.
El peligro está en que ETA, presionada por sus presos y en difícil situación, podría reabrir negociaciones para aceptar las ofertas de Zapatero, que nunca han sido retiradas ni lo serán porque nuestro deshonroso presidente siempre persiste en sus errores guiado por una visión de España tan personal como ruin y traicionera. El Presidente del Gobierno de España será quién regale un trozo de ella al terrorismo separatista como medio de satisfacer su ego, porque tal felonía no le daría ni votos. Un estúpido vendepatrias que siempre beneficia a los enemigos de la nación que preside.
Y aquí no pasa nada. Los ciudadanos moralmente dormidos y pasando de todo y quienes deberían encausar de oficio a los facinerosos que nos gobiernan, por su inoperancia parecen estar en la nómina de esos mismos gobernantes. Una vez más, todo pasará desapercibido y la oposición que debería armar el gran escándalo, ni está ni se le espera. No reacciona y si lo hace será para empezar diciendo "Buenooo..." y terminar con un "No hablemos del pasado...".
Satán los cría y ellos se juntan.
y su ética al PSOE a cambio de un plato de
vocal en el CGPJ.
Despacio pero sin pausa se van conociendo los indecentes tejemanejes del presidente Rodríguez, alias ZP, que ha sido capaz de ofrecer a ETA la anexión de Navarra al País Vasco, la impunidad de las organizaciones etarras Jarrai y del Partido Comunista de las Tierras Vascas, la excarcelación del asesino múltiple De Juana Chaos y la aceptación de un Gobierno autonómico compuesto por el PNV y el brazo político de ETA para que gobernase en el País Vasco, incluyendo la anexionada Navarra.
Semejante felonía era un paso definitivo para la independencia del País Vasco y, de haberse consumado la "hoja de ruta", suficiente para el procesamiento de ZP y otros actores por alta traición. Entre ellos, el Juez Gómez Benítez, interlocutor por parte del "Gobierno" en aquellas reuniones, por entonces abogado de la confianza del PSOE y hoy vocal del Consejo General del Poder Judicial, cargo al que ascendió sin duda en pago por los servicios prestados a los intereses socialistas, que no a los nacionales. Además de este juez, participaron en las negociaciones para romper la integridad nacional el presidente del Partido Socialista de Euskadi (PSE), Jesús Eguiguren, y el ex fiscal general del Estado, Javier Moscoso, todos ellos colaboradores necesarios y cómplices.
Todo ello forma parte del contenido de las reuniones mantenidas por representantes del "Gobierno" español y ETA en Oslo, en diciembre de 2006, según las actas incautadas en Francia a los etarras que han sido desveladas por el periódico El Mundo el 3 de marzo 2010.
Nuestro indigno presidente recibió una ETA prácticamente derrotada. Nunca había estado la banda tan débil como entonces, en todos sus frentes: en el "armado", en el institucional, en el social, en el económico. Pero no olvidemos que, en marzo de 2004, los enviados del PSOE llevaban tiempo negociando con ETA, así que cuando Rodríguez llegó a la presidencia, la banda terrorista consiguió uno de sus objetivos eternos: ser reconocido por el Estado español como interlocutor válido, y además con arbitraje internacional. Otra traición más.
Conseguido esto, las negociaciones con ETA, siempre negadas, se sucedieron y así, en diciembre de 2006 el "Gobierno" español ya ofrecía todo aquello por lo que ETA había estado matando para conseguirlo. O casi todo.
ETA vió tan débil y entregado al presidente Rodríguez, obsesionado por apuntarse la gloria del fin de ETA a cualquier precio, que tiraron demasiado de la cuerda y se rompió. Una gran parte de ETA reprocha a su cúpula el no haber aceptado tan generoso e inaudito ofrecimiento o por lo menos no haber roto las negociaciones cuando tenían encima de la mesa una serie de objetivos ya conseguidos, así que hoy muchos están exigiendo a ETA que retome las negociaciones allí donde las dejaron.
En eso están, pero después de haya llegado a la opinión pública el contenido de las reuniones, lo que se puede esperar es que adopten todas las medidas necesarias para que se desarrollen con el máximo secreto y nos den hechos consumados.
El peligro está en que ETA, presionada por sus presos y en difícil situación, podría reabrir negociaciones para aceptar las ofertas de Zapatero, que nunca han sido retiradas ni lo serán porque nuestro deshonroso presidente siempre persiste en sus errores guiado por una visión de España tan personal como ruin y traicionera. El Presidente del Gobierno de España será quién regale un trozo de ella al terrorismo separatista como medio de satisfacer su ego, porque tal felonía no le daría ni votos. Un estúpido vendepatrias que siempre beneficia a los enemigos de la nación que preside.
Y aquí no pasa nada. Los ciudadanos moralmente dormidos y pasando de todo y quienes deberían encausar de oficio a los facinerosos que nos gobiernan, por su inoperancia parecen estar en la nómina de esos mismos gobernantes. Una vez más, todo pasará desapercibido y la oposición que debería armar el gran escándalo, ni está ni se le espera. No reacciona y si lo hace será para empezar diciendo "Buenooo..." y terminar con un "No hablemos del pasado...".
Satán los cría y ellos se juntan.
